La Junta de Castilla y León invertirá 1.218.455 euros en la monitorización y ejecución de medidas de gestión para el oso pardo y el urogallo cantábrico. Las Patrullas Oso y Urogallo de la Fundación Patrimonio Natural llevarán a cabo estas acciones, complementando las labores de los agentes medioambientales y celadores de medio ambiente de la Junta.
Las actuaciones para el oso pardo incluirán el seguimiento de su estado de conservación en zonas de especial protección, como la Sierra de Ancares, Alto Sil, Picos de Europa en Castilla y León, Fuentes Carrionas y Fuente Cobre. El trabajo implicará la estimación anual del tamaño de la población, seguimiento en zonas de corredor interpoblacional y atención a avisos de indicios, observaciones directas y daños ocasionados por la especie.
Monitoreo y conservación del urogallo cantábrico
En cuanto al urogallo cantábrico, el seguimiento se realizará en áreas de especial protección como Alto Sil y Omaña, Ancares y Picos de Europa en Castilla y León. El Plan de Monitorización establece el estudio de la presencia o ausencia de ejemplares en cuatro ZEPA de la provincia de León, así como la estima poblacional mediante técnicas genómicas.
Además, se llevarán a cabo batidas estivales para determinar el éxito reproductor de la especie y se financiarán trabajos de captura y radiomarcaje de ejemplares de urogallo para mejorar el conocimiento sobre la misma.
Estudio de la influencia de mesocarnívoros en poblaciones de urogallo cantábrico
También se incluye en los trabajos aprobados un estudio de la influencia de las comunidades de mesocarnívoros en las poblaciones de urogallo cantábrico existentes en las ZEPA Alto Sil y Omaña.
Este proyecto tendrá un plazo de ejecución que finalizará el 31 de diciembre de 2024. Con esta inversión, la Junta de Castilla y León refuerza su compromiso con la conservación de la biodiversidad y la protección de especies emblemáticas como el oso pardo y el urogallo cantábrico.